Que un gato vaya feliz al veterinario, o a cualquier otro sitio fuera de su territorio, no es tarea sencilla. Hay gatos que experimentan nervios y estrés al salir de su casa. Debes entender que su hogar es su territorio habitual y tener que trasladarse no le hace mucha gracia. Así que con el objetivo de que los traslados o los viajes de tu gato sean más agradables y llevaderos, sobre todo al visitar el veterinario, te dejamos nuestros consejos y recomendaciones.
Veámos uno a uno, cuáles son nuestros consejos para que tu gato vaya feliz al veterinario.
¿Cómo acostumbrar a tu gato al trasportín?
Te recomendamos seguir los siguientes pasos:
- Coloca el trasportín temporalmente en una zona de la casa donde el gato suele pasar mucho tiempo. Se trata de que de vez en cuando vea el trasportín y no lo asocie siempre con salidas de casa.
- Dentro del trasportín introduce ropa con vuestro olor o el del gato para que se sienta cómodo.
- Introducir también premios de comida.
Hay gatos que pueden no decidirse a entrar hasta que no pasan unas dos o tres semanas. ten paciencia. En estos casos dejaremos pacientemente el trasportín durante este tiempo hasta que entre.
Así conseguirás que tu gato relacione el trasportín con confianza y experiencias agradables y positivas.
¿Cómo hacer entrar a tu gato al trasportín?
Como ayuda utilizaremos feromonas artificiales, como las feromonas en spray Feliway. Debemos hacer los siguiente:
- Treinta minutos antes de la salida de casa se ha de rociar Feliway dentro del trasportín directamente o preferiblemente en la toalla o manta (dos pulverizaciones).
- Pasados treinta minutos se ha de introducir el gato. Podemos poner premios de comida dentro del trasportín y esperar a ver si el gato quiere entrar. Si no se decidide a entrar, entonces lo cogeremos suavemente y lo introduciremos. Si se niega a entrar, intentaremos no forzarlo. Abriremos el trasportín quitando la parte superior, pondremos al gato en la base y volveremos a cubrirlo y cerrarlo.
En el caso que tu gato no esté habituado al transportín, te recomendamos hacer esto:
- Sitúa el trasportín en una habitación pequeña, sin zonas donde sea fácil esconderse. Coge a tu gato y entra con él en dicha sala cerrando la puerta. Haz movimientos tranquilos y no persigas al gato.
- A continuación, ofrécele premios de comida cerca del trasportín con la intención de que se acerque a él. Cuando esté cerca, lo cogeremos suavemente y lo introduciremos dentro del trasportín. Si el trasportín posee puerta superior, le haremos entrar por esta puerta. Si no es así, entonces el trasportín tendrá que estar abierto y una vez el gato está dentro pondremos la tapa.
¿Cómo hacer el traslado a la clínica?
El día anterior a la visita al veterinario colocaremos el trasportín como hemos indicado anteriormente.
Cuando tengas que transportar a dos gatos se recomienda hacerlo en trasportines separados.
Ten en cuenta, que la mayoría de gatos están más tranquilos si no observan el entorno durante el trayecto. Los estímulos visuales externos los pueden estresar más, aunque hay gatos que prefieren percibir todo lo que sucede a su alrededor.
Puedes observar fácilmente si tu gato está más tranquilo con el trasportín cubierto o descubierto y decidir lo mejor para él.
Si el trayecto es en coche, colocar el trasportín en el asiento y sujetarlo con el cinturón de seguridad. Esto permite que el viaje sea seguro y reduce los movimientos.
Una vez de vuelta en casa es importante limpiar el transportín para eliminar los olores de la clínica.
Qué trasportín para gato es mejor
Transportines o cestas para gatos hay de muchos tipos, pero ciertas características nos darán más confianza. Son las siguientes:
- Estabilidad
- Procura que no sea de tela, o tejido, ya que la estructura es menos consistente.
- Que puedan abrirse de manera superior y lateral es muy interesante y útil. De esta forma la entrada y salida del gato es más fácil y agradable. Además algunas exploraciones en la clínica se pueden iniciar con más facilidad abriendo solamente la parte superior.
Llegada a la clínica
Para evitarle estrés, lo mejor es visitar una clínica o hospital felino. De esta manera, evitamos cruzarnos con perros y el gato permanecerá más tranquilo. Este es nuestro caso; en Balmesvet disponemos de dos hospitales al lado pero separados: hospital felino y canino con entradas y salas de espera independientes. De esta manera no hay contacto entre gatos y perros y disminuimos el estrés.
¿Qué le proporciona la sala de espera exclusivamente felina a tu gato?
El objetivo de la sala de espera felina es proporcionarle a su gato la máxima comodidad y tranquilidad antes de la visita con su veterinario. Esto lo conseguiremos de la siguiente manera:
- La sala está aislada de la sala de espera de perros, evitando que la presencia física y los olores de los perros puedan estresar a los gatos.
- Junto a tu silla, dispones de una estantería para colocar el trasportín. Debe colocar el trasportín de manera que su gato lo esté mirando a usted y no a los otros gatos que esperen en la sala.
- Dispone de una toalla para poder tapar la totalidad del trasportín y de esta manera poder ayudar a que tu gato se sienta escondido y protegido, reduciendo el estrés durante la espera.
- La sala de espera felina está acondicionada con feromonas que le proporcionarán a su gato un ambiente de tranquilidad y bienestar.
¿Qué le proporciona la consulta felina a su gato?
El objetivo de la consulta felina es proporcionarle a su gato la máxima comodidad y
tranquilidad durante la visita con su veterinario. Esto lo conseguiremos de la siguiente manera:
- La consulta es exclusiva para gatos. El hecho de que no haya olores de perros reduce mucho el estrés.
- La sala de visita felina está acondicionada con feromonas.
- La mesa de exploración es más alta, hecho que ayuda a incrementar la sensación de seguridad de su gato.
- La mesa de exploración está fabricada de un material (que no es frío, ni ruidoso, ni refleja, ni resbala) que no incomoda a su gato, como sucede con las tablas metálicas que habitualmente se utilizan en las consultas de perro.
- El veterinario seguirá un protocolo de aclimatación y aproximación a su gato que facilita que se sienta cómodo y seguro.
- El examen físico se realiza siguiendo un protocolo de exploración que minimiza el estrés de su gato.
La vuelta a casa
Si su gato no convive con otro gato, cuando llegue a casa debe dejarlo en una habitación tranquila, sacarlo del trasportín con cuidado y llevarse el trasportín inmediatamente para limpiarlo completamente con Amonio cuaternario.
La limpieza del transportín se ha de realizar porque en el trayecto y con el veterinario es posible que su gato haya expulsado feromonas de alarma que se han quedado impregnadas en las paredes y el suelo del trasportín.
Dejaremos que el gato se relaje en la habitación y que salga a su voluntad. Puede ser que pase bastante rato o incluso horas, entonces recomendamos entrarle sus recursos básicos (comida y agua, arenero, rascador, juguete y camita).
Vigilaremos el acercamiento que hay ente los dos gatos y si vemos que hay buen contacto, dejaremos que se relacionen normalmente. Si vemos que hay tensión entre ellos, dejaremos el gato que acaba de llegar encerrado en la habitación y con una toalla frotaremos sus mejillas para que coja su olor. Saldremos de la habitación y se lo mostraremos al otro gato, también.
Pasaremos la toalla por los muebles en los que normalmente se acerca. Haremos lo mismo con el gato que está por casa, frotaremos otra toalla por sus mejillas y entraremos en la habitación y se la mostraremos al gato que está encerrado.
Esperaremos un rato a que se habitúen a los olores e iremos abriendo la puerta poco a poco para comprobar cómo es el contacto.
Recomendamos no tener prisa, pueden pasar varias horas antes de que puedan estar juntos de nuevo, entonces recomendamos entrarle sus recursos básicos (comida y agua, arenero, rascador, juguete y camita).
Esperamos que con nuestra ayuda como Hospital Felino logres que tu gato vaya feliz el veterinario. Tú tampoco te estreses. Tomáoslo con calma, pero si necesitas ayuda, no dudes en contactarnos.
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